Hola niños,
En breves fechas el capítulo de «Perú, los inicios» tocará a su fin, y volveré a España por Navidad, como el buen hijo de El Almendro, que todos los años volvía a la olor de la manduca nochebuenera. ¡Cómo nos tocaban la fibra los publicistas turroneros!, todos los años viendo sufrir a esa madre que lloraba por la ausencia de su retoño que hacía la mili en Melilla, para en el último momento ver aparecer al zángano en cuestión (qué probablemente llegaba tarde porque había alargado la farra con sus colegas de regimiento la noche anterior) con la consiguiente alegria de la susodicha y lo primero que hacía era jalarse un trozo de turrón.
Bueno después de destripar unos de los iconos navideños de la televisión de los ochenta, voy a dedicar este post a hacer una exposición de típicas escenas de la vida peruana, osea poner unas foticos, digamos que curiosas, de lo que he visto en estos dos meses por tierras andinas.
En primer lugar os pongo una fotillo del paisaje que veo todos los días.
Pues eso, vivo en un desierto. La peña cuando piensa en Perú, lo primero que le viene a la cabeza es Machu Picchu, luego los Andes y a alguno más ilustrado el Amazonas. Pues yo vivo y trabajo en el puto desierto. Aquí lo podeis comprobar. Arena y más arena, con dunas que corren como gamos y tapan los caminos que luego tenemos que limpiar. Y encima como no podía ser de otra manera, hace un viento de mil demonios. Entonces si sumamos arena, más viento, más factor de protección 50, tiene como resultado a Enrique rebozado de arena cual croqueta al fin de su jornada laboral. Encantador.
Pues esto es lo que veo cada día: el vertedero lineal de la Panamericana. Aquí la peña utiliza los márgenes de las carreteras para arrojar la basura. Así tenemos que las carreteras son unos vertederos en toda su extensión. Alguna vez me he encontrado a camiones «botando» es decir tirando la basura, y la policia 50 metros más allá sin decir ni mú. En fin, animalicos… En esta foto en particular se puede ver que han tirado varios monitores de ordenador. Eso quiere decir que ese depósito es reciente, ya que todavía no han pasado los chatarreros a recoger la basura de valor.
Esto es una vista de Pacasmayo, la ciudad más importante de por aquí. Aunque más que Perú, me parece que esté en Gaza. Esos tonos ocres terrosos, esos depósitos de agua elevados, casas a medio construir (o derruir). Me encanta ese aire decadente medio mierdoso…
Publicidad electoral. Aquí hay elecciones para el año que viene, pues bien, desde Octubre como mínimo que fue cuando llegué, todos los jodidos muros que hay al lado de la carretera (que son muchos) están pintados con la publicidad de los diferentes candidatos. El de la foto es de un tal Sisniegas, que se presenta a Alcalde Provincial (más o menos como presidente comarcal) y dice que es catedrático de no se sabe muy bien y muy profesional. Más que publicidad electoral parece que se publicite en la sección de contactos.
Ahora voy a abrir la sección Medios de Transporte:
Empezamos por la movilidad animal, o sea el burrico. Aquí utilizan los burros mogollón. El de la foto en particular está cargado de caña de azucar. Pero hay escenas más espectaculares. Muchas mañanas me encuentro con unos 10 burritos atados uno detrás de otro y cargados de ladrillos. A ver que día puedo pillar esa foto.
Esta foto no es una excepción o algo puntual. Es bastante común encontrarse a familias enteras encima de una moto. Hay que advertir que aquí, al igual que en España, el uso del casco es obligatorio.
Ahora os presento lo que es un moto-taxi, más conocido como motopollo. De estos hay cientos y parecen enjambres, te los encuentras en todas las calles ciculando en cualquier dirección, adelantándote por la derecha, sin luces… en fin, sencillamente LOS ODIO.
Que hay que transportar unos metrillos de arena y unos palos, y encima hay que llevar a los currelas para descargar la arena, pues nada todos juntos y a correr. Esta foto tampoco es algo puntual. Imagínaos que ese camión tenga un accidente, resultado: 8 muertos.
Bueno, y esta es mi favorita:
Ante ustedes ¡el camión Ben-Hur! Aunque ahora que vuelvo a ver la foto, también tiene un rollito a las pelis de Mad Max. En fin, solo teneis que echarle un poquillo de imaginación, y en lugar de carreras de cuádrigas, ver a Charlton Heston conducir un traileraco de estos destrozando las ruedas del oponente. Hollywood tiene que hacer un re-make ya.
Ahora tenemos el carte de los gandules.
Jeje, imaginaos cuando vi por primera vez este cartel. Hombre aquí no se matan a trabajar, pero tampoco hay razón para explicitarlo. Luego me enteré que es una explotación agraria super grande de pimientos, que se llama Gandules y que aquí la palabra gandul no tiene ningún significado, aunque hay más de uno… y de diez o veinte.
Esta es una muestra de la prensa peruvian. Quedaos con la Reina de la Pota. Por lo que parece, aquí la palabra pota tampoco tiene el siginificado que le damos en España.
Quie avisa no es traidor, y si señores, aquí el riesgo de tsunamis es alto. Cuidadín, cuidadín…
Y ahora viene mi foto favorita, ¡la del aquelarre gayer! Juzgar vosotros mismos:
Un atardecer volviendo de Trujillo (principial región de la región) nos encontramos con unos tíos togados cantando letanías alrededor de una hoguera, con una bandera del orgullo gay. ¿Estarán quemando a algún miembro homófobo de la Coferencia Episcopal peruana? Aynnn, sueños húmedos… Luego me enteré que en Perú, la banderita del arco iris, es la bandera de los incas. Bueno explicado lo de la bandera, aún me queda la duda de todo lo demás. En fin, yo hice las fotos y nos fuimos quemando ruedas, no sea que los incas gays decidieran vengar a Atahualpa quemando a un par de españolitos despistados.
Bueno nenes, esto es todo por el momento. Espero que en el siguiente capítulo «Perú, el retorno» encuentre otras fotillos curiosas para compartir con vosotros. Ahora estoy centrado en mi próxima vuelta al suelo patrio. Ya parece que estoy escuchando lo de «Por favor, ajusten sus cinturones de seguridad», ¡que ganicas tengo!
¡¡Hasta luego!!
Tienes que conseguir los planos de una motopollo. Tenemos que fabricarla.
Mmmmmm, desiertos, vertederos, camiones cargados de personas, coches tuneados y ceremonias gaiers… Enrique, estas montando un parque eolico o una cupula del trueno? Vaya, vaya con el Peru postapocaliptico.
Venga que ya queda poco para volver a casa por navidad. Vuelveee a casa vuelveee…. malditos publicistas, no nos libraremos de la cancion en la vida 🙂
Eso!! Venta ya acá p´acá!!
Y tráete a la Reina de la Pota!
Le auguro un gran futuro por aquí…
Y si además consigues «traerme prestada» una de las señales de los Gandules, te lo agradeceré como es debido. Es decir: con un «rotaoret/gintónico» y una bolsa de ganchitos…
Besos En!!!
XD